La portería de la selección femenina de fútbol estadounidense no sólo guarda entre sus palos dos medallas de oro en los Juegos Olímpicos de Pekín y Londres, números de escándalo (79 partidos sin encajar un gol de los 165 jugados desde 2000) y ser una de las metas más poderosas del Mundial Femenino de Canadá. La portería estadounidense guarda además la belleza, la polémica y los triunfos de su guardameta: la futbolista de 33 años Hope Solo.
La guapa y mediática portera no sólo ocupa portadas por sus logros deportivos. Está a punto de batir récords de partidos disputados, 165 contra 173, y victorias, 126 contra 133, en la actualidad posesión de la meta Briana Scurry,además, de ser la esperanza de miles de aficionados.
Sin embargo, la carrera de Solo no sólo ha estado marcada por sus triunfos si no también por ocupar portadas de revistas gracias a su belleza, artículos por sus escándalos y detenciones y por tener detrás de ella una historia de violencia y malos tratos.
Solo tuvo una infancia difícil y solitaria marcada por los malos tratos y el alcoholismo de su madre. Fue ella misma la que relató en el canal deportivo ESPN su dolorosa infancia. Su hermano y ella vivieron un infierno con continuas palizas envuelto todo ello en un ambiente de pobreza y abandono.
Cuando tenía sólo 7 años su padre, un ex combatiente de Vietnam, se la llevó presuntamente de vacaciones. Según iban pasando los días Solo se dio cuenta de que algo no iba bien. Varios días después la encontraron a ella y a su hermano durmiendo en un banco de Seattle. Su padre fue detenido y acusado de secuestro.
Fue el fútbol, al que le enganchó su padre, lo que le hizo salir de esa espiral de dolor. Siguiendo la estela de su ídolo, la guardameta del Ashton School,Camilla Baez, dos veces campeona del mundo se centro en el fútbol y así encaminó su vida.
Solo empezó su carrera futbolística como delantera en la Escuela Secundaria Richland y no fue hasta la universidad cuando descubrió que su verdadera pasión era estar bajo los palos. Así fue pasando por varios equipos, hasta que en 1995 entró a formar parte de la selección sub-16, hasta la actualidad donde es considerada una de las mejores porteras del mundo.
Sin embargo, no todo en el fútbol ha sido un camino de rosas. Su mal carácter, que le ha llevado a varios enfrentamientos con su entrenados, su aparición en varios programas de televisión como 'Dancing with the Stars' o sus posados en revistas como 'The Body Issue' han hecho que su carrera sea algo más que la deportiva. Y es que su 1,75 de altura, sus ojos azules, su escultural cuerpo la han convertido en toda una sex symbol.
De hecho, el año pasado Solo fue víctima del hacker de los famosos que pirateo las cuentas iCloud de varios personajes entre ellos, la portera estadounidense. Las imágenes de Solo desnuda, con las piernas abiertas frente a un espejo, o regando el jardín de su casa como Dios la trajo al mundo dieron la vuelta al mundo y la convirtieron en aún más en objetivo de todas las miradas.
Pero si por algo ha sido recordada Solo en los últimos años es por los casos de violencia que han protagonizado ella y su marido, el ex futbolista estadounidense Jerramy Stevens, con quien ha tenido varios altercados con la policía.
En enero ambos fueron detenidos en California por conducir una furgoneta de la Federación de Fútbol de EEUU en estado ebrio, y agredir, cuando iban a ser arrestados, a los agentes. Es escándalo fue mayúsculo, más aún cuando Solo se encontraba concentrada con la selección. Fue sancionada con 30 partidos y no pudo jugar los clasificatorios del Mundial frente a Francia e Inglaterra.
Sin embargo, su lista de problemas con la Justicia no termina ahí. En junio de 2014 Solo fue detenida por violencia doméstica al golpear a su sobrino, de 17 años e hijo de su hermanastra, tras una disputa familiar. El joven presento arañazos en un brazo y en la nariz, un corte en la oreja derecha y varios moratones.
Según la declaración de su hermanastra, la guardameta había bebido aquella noche. Acudió a su casa al encontrarse deprimida porque había perdido un vuelo para disputar un partido. Solo fue a casa de su hermanastra y en un momento en que ésta había acudido al baño, la futbolista comenzó a golpear a su sobrino. Cuando llegó la policía Solo estaba borracha e incluso insultó a los policías.
Poco después, en una entrevista que concedió a 'Good Morning America' explicó que pegó al joven, de 120 kilos, en defensa propia. El caso todavía esta en manos de la Justicia, aunque dañó mucho la carrera de Solo que, incluso, llegó a asegurar que estaba cansada de que se la asociará con violencia doméstica.
